Si has hablado con alguien que ha viajado a Japón te contará de todo, cientos de anécdotas y curiosidades, desde que ha visitado los lugares más bizarros a que ha encontrado su paz interior en un templo entre montañas. Pero, hay algo de lo que estamos 100% seguros que esa persona ha dicho: Quiero volver a Japón.

Pero, ¿qué es lo que tiene Japón, que todo el mundo que ha ido alguna vez quiere repetir?

Japón, su cultura, su gastronomía, su gente. El país del sol naciente tiene algo que “te atrapa” y es muy difícil de describir. Mientras esperas en la terminal del aeropuerto para entrar en el avión que te llevará de regreso a casa, te dices a ti mismo: “quiero volver a Japón”.

Existen 1000 razones para volver. Desde Conexión Japón creemos que estas son algunas de las que compartimos muchos de los amantes de Japón:

1. La forma de ser del japonés

Cada día que pasa en tu viaje por Japón, sus habitantes te van a sorprender para bien. Son el máximo exponente de amabilidad, hospitalidad y respeto. Aunque estés en un país lejano, con otro idioma, cultura, normas y tradiciones, no importa. Te sientes muy a gusto en todo momento, te sientes como en casa. Parece confuso, pero la forma en la que se relacionan contigo y tú con ellos, es extrañamente familiar.

2. Orden y limpieza

Aunque son dos conceptos diferentes, en este caso uno no puede existir sin el otro. Cuando bajas del tren que te ha traído hasta el centro de Tokio desde el aeropuerto, te quedas alucinado con la limpieza de las calles. Pero no solo las zonas transitables, también están impecables todos los lugares públicos, taxis, metros, baños… Pero, lo que más nos llama la atención es que en un sitio tan increíblemente limpio, NO HAY PAPELERAS.

No solo la limpieza es algo increíble, también te llama mucho la atención con qué puntualidad salen los transportes públicos, o la eficacia con la que te indicará el personal de la estación de trenes si tienes algún tipo de duda.

Podríamos decir que todo esto va unido a lo que entienden por “lo correcto”. Todo genera equilibrio en una sociedad simplemente brillante.

3. La belleza de lo ordinario

De todos los puntos, este es el que más nos fascina y que solo quien ha viajado a Japón puede entender. Día a día vives sorprendido por los detalles y la belleza que aplican a los detalles de la vida cotidiana.

Cosas tan sencillas como las tapas de alcantarillas son verdaderas obras de arte que cambian según la ciudad en la que te encuentres, con qué dedicación te envuelven un regalo o su protocolo a la hora de dar una tarjeta de visita. Constantemente vas a alucinar con el esfuerzo que hay detrás de las cosas más sencillas y, sin duda, esos detalles marcan la diferencia.

4. La gastronomía

En esta lista, por supuesto, no puede faltar la gastronomía. Viajar a Japón consigue que rompas todos los estereotipos. ¡No todo es sushi!

Al viajar a Japón verás que no tiene nada que ver con “lo japonés” que has probado en tu país de origen. Los primeros días te sorprenderás con nuevos sabores y texturas, y al final del viaje no podrás por menos que acordarte de ese plato de ramen en el Ichiran que nada tiene que ver con los de tu ciudad, o esos “triangulitos” que más de una vez te han salvado una mañana que no habías desayunado.

Es muy difícil de describir, nuestro mejor consejo para la gastronomía es: viaja con la mente abierta y no te cortes, experimenta. Además, comer en Japón es sorprendentemente económico. Sobre todo al descubrir que es habitual no tienes que pedir bebida, en la mayoría de los restaurantes te incluirán agua o té de forma gratuita.

5. La seguridad

Es probable que esto lo hayas oído o leído en más ocasiones, pero es para vivirlo en persona, y es una costumbre que echarás de menos. Ver cómo la gente deja los móviles y portátiles en la mesa de una cafetería para guardar su sitio mientras va al baño. Pero, no solo cuando toman un café en un sitio tranquilo, también en los bares de fiesta a altas horas de la noche.

Perder la cuenta de las bicicletas que hay aparcadas por todo Japón y no haber visto un candado. Lo común es que si pierdes la cartera, y al día siguiente vuelves por tu camino, la encuentres donde se te había caído.

6. Puro contraste

Japón tiene una tradición muy rica que sigue arraigada fuertemente en la sociedad y en cada casa. Pero, por otro lado, desde los años 60 y 70 ha crecido a pasos agigantados en el apartado tecnológico. Este mix nos ofrece increíbles contrastes en cada esquina.

La sensación ver un karaoke súper moderno con robots en la entrada, y al lado un templo de lo más tradicional, es algo a lo que no te acostumbras con facilidad, ni en tu segundo viaje. Podrás ver a un cosplayer y a pocos metros una maiko, o una tienda de yukatas al lado de un pachinko.

Estos son solo 6 motivos por los que todos queremos volver a Japón. Pero, hay muchos más. Tú, ¿por qué quieres volver a Japón?

Sea el motivo que sea, estamos seguros de que no has vuelto a ver el mundo de la misma forma desde que volviste.